Polonia es uno de los principales exportadores de videojuegos en Europa, con estudios que han creado éxitos como el videojuego The Witcher, de la desarrolladora CD Projekt. No es casualidad que fuera allí donde Jimena Hernández, estudiante de Ingeniería en Ciencia de la Computación y Tecnologías de la Información, encontrara un escenario perfecto para combinar su pasión por la tecnología con su espíritu explorador. Para ella, su viaje desde Guatemala hasta Białystok, en Polonia, fue una aventura que puso a prueba su determinación y expandió sus horizontes académicos. Luego de cursar un semestre de intercambio en Polonia, de febrero a julio de 2025, Jimena regresó a Guatemala para continuar sus estudios en UVG. Acá te contamos su historia:
Sueño presente
Jimena cuenta que desde pequeña le gustaba la matemática. En diversificado, conoció el lenguaje Python y descubrió una forma de combinar su lógica matemática con la creatividad. Su interés por la programación la llevó a seguir la carrera de Ingeniería en Ciencia de la Computación y Tecnologías de la Información. Actualmente, se encuentra en quinto año de la carrera y sigue una especialidad en Desarrollo de Videojuegos.
También trabaja como líder de producto en Garoo Inc., donde dirige un equipo enfocado en inteligencia artificial y se encarga de que las aplicaciones se hagan realidad. Sin embargo, desde el inicio de su carrera, Jimena siempre tuvo una meta clara: estudiar en el extranjero. Eso la motivó a buscar constantemente convocatorias de becas para viajes internacionales.
En enero de 2025, se abrió una convocatoria para estudiar en Polonia. Luego de aplicar, un correo de la Universidad Tecnológica de Białystok (Politechnika Białostocka -PB-, en polaco) confirmó su selección para el intercambio. La noticia la tomó por sorpresa, pues ya había iniciado el semestre en Guatemala y debía preparar todo para viajar con rapidez. Uno de los desafíos que encontró fue que en Guatemala no existe embajada polaca, lo que obligó a Jimena a viajar a Panamá para tramitar su visa.
“En solo tres semanas, gestioné la papelería para la universidad en Polonia, convalidé cursos y conseguí una cita urgente en la embajada en Panamá. Obtuve mi visa de estudiante y emprendí el viaje”, explica. Para ella, el viaje fue agotador pero retador. Eran 15 o 16 horas de vuelo, con escalas en Estados Unidos y Alemania, antes de llegar a Varsovia. Desde allí tomó un bus de dos horas a Białystok. A su llegada, muy cansada y de noche, solo pensó en instalarse y continuar su aventura.
Polonia: más allá de las expectativas
En la Tecnológica de Białystok, Jimena cursó materias que convalidaron sus estudios en Guatemala. Desde febrero hasta julio de 2025, tomó cursos de inglés para mejorar su nivel, herramientas para desarrollo web ágil, e interacción humano-computador avanzada, además de administración de Linux. Durante su intercambio también participó en proyectos académicos colaborativos con estudiantes internacionales, donde aplicó sus conocimientos en programación al diseño de prototipos de aplicaciones interactivas. Estas experiencias le permitieron poner en práctica lo aprendido y conocer metodologías ágiles utilizadas en Europa.
Jimena explica que el intercambió ha impactado su vida profesional. Por un lado, fortaleció competencias técnicas en programación, experiencia de usuario y administración de sistemas. Por otro, desarrolló habilidades como liderazgo intercultural, comunicación en inglés y resolución de problemas en contextos multiculturales. Gracias a ello, regresó con nuevas ideas para aplicar en nuestro país. Además, amplió su red de contactos que le abren las puertas a futuros proyectos internacionales.
A pesar de sus temores iniciales sobre el clima y la gente, Polonia la sorprendió. Según cuenta, disfrutó cómo el país se transformaba en un verde intenso con la llegada del verano, lo cual contrastaba con su idea de un lugar frío y gris.
También cuenta que descubrió la calidez de la juventud polaca y la seguridad y limpieza de ciudades como Cracovia, Gdansk y Varsovia. Disfrutó de la gastronomía polaca, alta en carbohidratos y sopas como el zurek y los pierogi, una especie de empanadas. A su regreso a Guatemala, Jimena se considera más independiente y con mayor experiencia. Ha superado el miedo a lo desconocido. Además, se ha adaptado a entornos donde, a veces, ni siquiera hablaban inglés.
Metas futuras
Jimena agrega que su próxima meta está en graduarse y profundizar sus conocimientos en la experiencia de usuario (UX). Luego planea cursar una maestría y crear su propia plataforma tecnológica para ayudar a Guatemala. Su consejo para quienes desean ingresar a una carrera en computación es: “Atrévanse a hacer lo que más les llama la atención de la programación, verán que es una carrera con potencial que tiene miles de oportunidades y miles de caminos”.
La experiencia de Jimena Hernández es ejemplo de las oportunidades que brinda la carrera de Ingeniería en Ciencia de la Computación y Tecnologías de la Información. También puedes especializarte en Desarrollo de Videojuegos, Seguridad Informática, Inteligencia Artificial y Machine Learning, o Ciencia de los Datos. Además, puedes especializarte en Ingeniería Aeroespacial cursando un semestre en la Universidad Julius Maximilians de Wurzburgo, Alemania.
Los intercambios y viajes académicos a países como Estados Unidos, Alemania, Canadá, España, Argentina, Japón y Polonia, como el que vivió Jimena, son parte integral de tu formación. Si deseas saber más de la carrera, haz clic en el enlace.
También te puede interesar
Especialízate en inteligencia artificial, seguridad informática o desarrollo de videojuegos